Los drones, unas aeronaves que vuelan sin piloto, protagonizan una revolución silenciosa que beneficia ya al medio ambiente.
Más conocidos por sus aplicaciones militares, su uso civil será más habitual en los próximos años, según los expertos. Diversos pioneros como America Renovable utiliza "eco drones" que funcionan con energía eléctrica para misiones ambientales: mejorar las cosechas con un menor uso de agua o pesticidas, ayudar a especies en peligro, predecir el comportamiento de huracanes y volcanes, observar desastres como los de Fukushima o apagar incendios forestales incluso de noche.